A mediados de enero, la gente hacía fila frente a un estudio fotográfico de Los Ángeles, California. Dentro, las adolescentes ojeaban percheros de ropa y mesas llenas de maquillaje, artículos de aseo y productos para el cabello.
A unas pocas millas, los incendios arrasaban las zonas donde antes vivían las niñas. La mayoría había perdido casi todo lo que tenía.
La casa de Avery Colvert, de 8º grado, en Pasadena, sobrevivió. Pero su escuela secundaria, en la cercana Altadena, había sufrido graves daños por un incendio llamado Eaton. Y las casas de muchas amigas de Avery se habían quemado.
“Los mensajes de grupo con mis amigas eran muy tristes —dice Avery—. Por unos días, cada pocas horas, la casa de otra chica había desaparecido”.
Avery quería ayudar, así que creó la página de Instagram Altadena Girls. Pedía donaciones del tipo de cosas que necesitaban sus amigas. No tenía ni idea de lo grande que se convertiría su iniciativa.